El cuidado de los pies es algo imprescindible. Siempre maltratados, pero a la vez, tan presentes.
Los pies son nuestra base, son lo que soporta el peso de nuestro cuerpo, son lo que nos permite desplazarnos o mantenernos. Pero, ¿qué suele pasar con ellos? Que los descuidamos mucho más de la cuenta.
Y no es algo que queramos afirmar para meter miedo en el cuerpo a nadie, es una realidad en la que coincide cualquier especialista en el ámbito de la salud. A lo largo de nuestras vidas, los pies sufren numerosos cambios tanto en su estructura ósea como en su musculatura y piel. Y esto, si se descuida, puede hacer que aparezcan toda clase de problemas.
Pero no nos vamos a detener ahí. Vamos a ver por qué es tan importante mantener un buen cuidado de los pies. Vamos a darte todo lo que necesitas saber para dar a tus pies la importancia y el trato que se merecen. Ni más, ni menos.
¿Qué puede suceder si no cuidas tus pies?
Además de mantener unos buenos hábitos o de contar con el calzado adecuado, como por ejemplo las chanclas de Surippa (diseñadas específicamente para ofrecer una buena ergonomía y protección), es vital tener claro por qué es fundamental cuidar los pies.
¿Y cuál es la mejor forma de saberlo? Entendiendo las consecuencias de tener unos pies descuidados y maltratados.
Lo primero que puede aparecer en unos pies descuidados es el mal olor. Aunque hay personas que, por cuestiones hormonales, son propensas a ello, quienes no se lavan los pies lo suficiente suelen sufrir este problema. También es habitual que surjan otros problemas como el exceso de sequedad, lo que provoca que la piel se agriete y surjan heridas.
Luego hay otras cuestiones como las uñas encarnadas, que pueden llegar a provocar infecciones bastante dolorosas, la aparición de callos o deformaciones de huesos, más conocidas como juanetes. Aun así, lo más peligroso es que tener problemas en los pies puede afectar a nuestra forma de andar y a nuestra postura, y esto, a la larga, puede derivar en problemas de columna, de espalda e incluso de cuello.
En efecto, al final es algo que afecta a toda nuestra salud en general. Por eso, si queremos disfrutar del máximo bienestar y no tener problemas de ninguna clase, es necesario que dediquemos tiempo al cuidado de los pies.
¿Cómo cuidar tus pies?
Lo primero y más importante es usar siempre el calzado adecuado. En función de la actividad que se vaya a realizar, hay que elegir siempre los zapatos correctos. Porque no es lo mismo ir de excursión al campo que acudir a la oficina o a una cena de gala. Cada situación exige su calzado, y eso es algo que tus pies y tu salud van a tener muy en cuenta.
Después, hay que asegurarse de darles una limpieza correcta. Mantén una rutina de baño habitual en la que dediques unos minutos a tus pies. Límpialos bien, por todas partes, y sobre todo asegúrate de secarlos correctamente. Si no lo haces, la humedad puede hacer que aparezcan hongos en las uñas o en la piel, y son especialmente molestos.
Asimismo, en caso de que surja cualquier dolor o notes algo distinto, no dudes en acudir a un especialista. De hecho, es importante que vayas a un podólogo cada cierto tiempo para llevar a cabo las revisiones adecuadas. Así, si surge algún problema, se puede detectar con antelación para tratarse cuanto antes y evitar que vaya a más.
Al final, lo único que hace falta es mantener unos hábitos saludables y dedicar cierto tiempo al cuidado de esta parte del cuerpo.
¿Has visto ya lo importantes que son? ¿Has comprobado lo fácil que es tener unos pies limpios y sanos? Pues el resto es tan sencillo como ponerte manos a la obra y dedicar unos minutos de tu día al cuidado de tus pies. Unos pocos minutos al día te pueden dar muchas más horas de alegría.
